15 de marzo de 2016

Eso del agilismo

AOC es Agile Open Camp. ¿Y qué es eso me suelen preguntar? Es un evento comunitario, autoorganizado, y mis 10 razones por las que tenés que ir al próximo AOC son:
  1. Marketplace del open space: ohhhh, qué cosa más bella! En una gran ronda, donde todos estamos sentados en el piso, los interesados se sitúan en el medio y proponen o cuentan un poco, ¿qué proponen? Una charla, alguna duda, sus ganas de conversar sobre cierto tema, alguna dinámica, se anota su nombre, el nombre de la actividad y se va situando en una grilla.
  2. Vas a pasar tres días fuera del tiempo, andá leyendo algo de tiempo Kairós para darte una idea.
  3. En un entorno totalmente increíble, sumergidos en la naturaleza, con unos cuantos kilómetros de por medio de cualquier pueblo.
  4. Rodeado de amigos, pará... ¿decís que no conocés a nadie? No te preocupes, eso no importa, lo que prima es el intercambio de ideas, experiencias, vivencias, como en todo trueque das algo y recibís otro tanto y así la magia va surtiendo efecto.

  5. Vas a poder realizar múltiples actividades que ni se te ocurrirían, por ejemplo en la edición 2016 hubo kata de guitarra, taekwondo bajo los árboles, sesiones de meditación, relajación, se filmaron y editaron videos de los distintos momentos, fútbol, se escribió el libro del evento, se compuso la primera versión del himno del AOC, fotografía nocturna, hubo fogones, guitarreadas, trekking por la montaña, paddle, cuentos de comunidades y tantas cosas más.
  6. Te vas a divertir, importantísimo, ¿quién quiere aburrirse? 
  7. En todo momento se dan charlas y conversaciones espontáneas, hay que estar atento, en cualquier momento ¡puede pasar cualquier cosa!
  8. World coffee, que fue world mate, último día por la mañana y cuando pensás que nada puede superar a todo lo vivido... chan... ahí lo tenés, 2 horas de escuchar, hablar, pensar y repensar la comunidad ágil, tres mesas de cinco o seis personas, escuchando lo más atenta y abiertamente posible, ¡imperdible! 
  9. Dinámicas espectaculares, como armar un circuito en grupos de a 20, el torneo de piedra, papel o tijera más emocionante del mundo, mirarse a los ojos con otra persona que no habías interactuado por un minuto y terminar abrazadas con lágrimas en los ojos.

  10. Y la última es una razón absolutamente personal, murió alguien muy querido y cercano pocos días antes, pensé en no ir y lo mal que hubiera hecho, me hizo tomar obligada distancia de todas mis ocupaciones, aliviar mis preocupaciones, pensar, volver a dar las cartas, conocer seres adorables e increíbles, compartir, divertirme, disfrutarlo y andar abrazando grandes amigos, a los que estoy agradecidísima, por las pilas, por la onda, por todo, ¡la verdad que yo no me lo perdería por nada del mundo!

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